La pasión y la excepción

Beatriz Sarlo
biblioteca beatriz sarlo
$22,690
Tres hechos únicos de la historia argentina la irrupción de Eva Perón en la esfera pública, el secuestro y la muerte del general Eugenio Aramburu, la obra de Jorge Luis Borgesson la materia de este libro imperdible. ¿Por qué son excepcionales, qué pasión expresan y los alimenta? Beatriz Sarlo se interroga sobre estos momentos que reconoce como fundamentales en su propia vida y descifra las claves de ese entramado en un impetuoso despliegue de imaginación crítica. Cuando parecía que todo se había dicho ya sobre Evita, el personaje histórico y el mito, Sarlo ofrece una lograda interpretación de lo que la hizo diferente. La autora describe y analiza, también de modo único, la sucesión de figuras, peinados, trajes, educación sentimental y declaraciones que gestan el cuerpo público de quien se volvió emblema del Estado de bienestar justicialista y heroína del peronismo. Un cuarto de siglo después, lograr la devolución del cadáver de Eva Perón, sustraído y ocultado por los líderes de la Revolución Libertadora,fue uno de los objetivos del grupo que secuestró al general Aramburu en1970 e introdujo a Montoneros entre los protagonistas de la causa peronista. El asesinato del militar, ritualizado como un ajusticiamiento, inició un ciclo diferente en la historia dela violencia política en la Argentina. Sarlo repiensa las noticias y el estupor de esos días, las relaciones entre Perón y Montoneros, incluido el filón católico de su núcleo inicial. Borges que llevaba décadas indagando sobre la justicia, el odio y la memoria y que dos meses después de esos hechos publica uno de sus cuentos más sangrientoses hilo conductor de estas exploraciones. Analizando magistralmente el saber del texto borgeano, la excepcionalidad de la belleza de Eva, la urdimbre extrema y pasional de la venganza, Beatriz Sarlo nos ayuda a comprender una configuración política y cultural que definiría los años setenta.

La Corte Suprema en escena

Leticia Barrera
derecho y política
$21,790

La Corte Suprema en escenaes el primer estudio sistemático sobre el funcionamiento cotidiano de la más alta institución judicial en la Argentina, que desde hace varias décadas viene ganando visibilidad y generando controversias en el debate. ¿Quiénes acceden a la Corte, ese lugar que parece por definición alejado e impenetrable, y qué esperan de ella? ¿Cómo la perciben los jueces, los funcionarios o los empleados? Leticia Barrera expone la diversidad de actores en juego y el significado que tiene el tribunal para cada uno de ellos.Están quienes llevan a cabo acciones de protesta y consideran el espacio judicial como un foro para hacer oír sus reclamos; están los litigantes que padecen como una falla el proceso de toma de decisiones del tribunal; están los jueces y funcionarios que ven en él casi un almacén de ramos generales al que llega todo tipo de causas; están quienes lo experimentan como una práctica burocrática de creación de expedientes. Con una fina mirada etnográfica, la autora se interna en un territorio poco explorado hasta ahora. El espacio de la Corte es reconstruido a través de observaciones directas, entrevistas, recolección de imágenes y de historias de vida, poniendo énfasis en aquellos dispositivos que permiten vislumbrar el accionar del derecho en las prácticas y en las conciencias. Así, analiza el origen y el curso de los expedientes, atendiendo a las condiciones físicas en que se producen, se archivan y se manipulan los escritos, y explica también cuánto de escenificación y de montaje tienen las audiencias, ycómo esto deviene un instrumento más en la puja por imponer la agenda judicial. La originalidad del libro consiste en presentar el derecho no ya como un conjunto de verdades eternas sino como una actividad cultural que genera conocimiento y a la vez influye en la subjetividad y los vínculos de los participantes. Al tomar nota de las relaciones materiales y simbólicas que los instrumentos legales activan, el funcionamiento del máximo tribunal permite poner en evidencia las instancias propias de la creación del derecho: ese cruce en el que precisamente se define lo jurídico.


¿Quienés construyeron el Río de la Plata?

María Juliana Gandini
hacer historia
$24,190

¿Qué sucedió en algún momento del siglo XVI para que el Río de Solís o el Mar Dulce, ese lugar aciago y marginal marcado por la canibalización de su descubridor, se transformara en el mucho más atractivo Río de la Plata y empezara a existir como tal, con características específicas e incluso promisorias para la Corona española? María Juliana Gandini vuelve sobre los vívidos relatos de conquistadores, exploradores y expedicionarios para contar, desde una perspectiva novedosa, esas décadas intensas y difíciles de la primera conquista. Atenta a la marea de relaciones, mapas, historias, cosmografías, informes y testimonios redactados en primera persona por los testigos europeos que llegaban a estas costas, la autora muestra hasta qué punto las representaciones que construyeron sobre el territorio y sobre las sociedades nativas fueron una pieza central para sobrevivir pero sobre todo para proyectar y sostener la conquista. Y explica que esos textos e imágenes eran en realidad productos mestizos, resultado de los esquemas perceptivos propios de sus tradiciones culturales, de la interacción dinámica con los pueblos nativos y del esfuerzo por traducir lo nuevo. Así, explora cómo la presunción de cuantiosas riquezas metalíferas empezó a circular como un rumor en intercambios entre los guaraníes y tupíes con los portugueses, hasta llegar a los españoles, y cómo esa información, que nunca pudo corroborarse en los hechos, fue creída y validada durante años por el aparato judicial español. Sin negar que la conquista efectiva fue un proceso violento y descarnado que doblegó a las sociedades nativas, María Juliana Gandini pone el foco en un aspecto mucho menos estudiado: la pasión de los viajeros españoles por escribir el Río de la Plata a partir de sus contactos con los grupos locales. Es así como logra develar con maestría que, desde las orillas del Mar Dulce, nativos e invasores construyeron otro capítulo de la modernidad.


Las sociologías de Marx, Durkheim y Weber

Ricardo Sidicaro
sociología y política
$19,590
La sociología nació con el impulso de pensar un tiempo de cambios profundos, en el que las sociedades del Antiguo Régimen se resquebrajaban rápidamente para dar paso al naciente capitalismo industrial. En esos años que transformaron el mundo occidental como se lo conocía, Karl Marx, Émile Durkheim y Max Weber se propusieron intervenir con sus explicaciones sociológicas para iluminar y resolver los conflictos que veían en sus sociedades y, al hacerlo, tuvieron una virtud que alcanza a pocos: inauguraron una manera científica de entender el mundo social. Este libro, tan útil como fascinante, viene a demostrar que, lejos de fosilizarse en los libros o volverse poco aplicables, los conceptos y herramientas metodológicas de los tres padres fundadores han logrado atravesar perfectamente vivos los siglos y las geografías y se vuelven más y más actuales en el siglo XXI. En estas páginas, que organizan y sintetizan el pensamiento de estos autores, Ricardo Sidicaro despliega toda su experiencia pedagógica de largos años en las aulas universitarias para proponer, además, una renovación del modo de enseñar estos clásicos ineludibles, que muchas veces solo se exige memorizar. Enlazando conceptos centrales con fragmentos de textos originales, este libro muestra, por ejemplo, la proyección que dio Marx a los estudios sobre luchas de clases y dominación política; el modo en que Durkheim anticipó las crisis de las sociedades futuras al analizar la escasa o nula reglamentación de la división social del trabajo, y el interés con el que Weber se dedicó a analizar las dificultades de su país para consolidarse económicamente y afianzar su integración social. Todos, en su tiempo, combinaron el pensamiento con la propuesta política, la reflexión teórica con la práctica de la investigación. Especialmente útil para estudiantes de ciencias sociales, pero apto también para quienes intentan un primer acercamiento a estos autores, este libro revela nuevos aspectos de ideas que muchos creen conocidas y, sobre todo, devuelve carnadura a tres pensadores totales que nos siguen enseñando a mirar.

La invención de los sexos

Lu Ciccia
ciencia que ladra...serie mayor
$27,890
¿Está el sexo en la naturaleza? ¿Quién dijo que hay dos géneros, o dos orientaciones sexuales? ¿Somos resultado de nuestras hormonas? ¿Cuánta biología hay en nuestro comportamiento, nuestros deseos, nuestra subjetividad? ¿Hay cerebros rosas y celestes? ¿Los genes determinan nuestras características, nuestro modo de ser, nuestras pasiones? La invención de los sexosresponde a estas preguntas revisando evidencia y discutiendo interpretaciones. Al hacerlo, muchas de las nociones que aceptamos como verdadescientíficas se revelan endebles y sesgadas, cuando no escandalosamente falsas. Lu Ciccia recorre la historia de la ciencia y desmenuza los argumentos con los que el discurso científico sobre la diferencia sexual construyó legitimidad para el sistema de valores androcéntrico y la supremacía del cis varón. En paralelo, revisa los modos en que, a lo largo de esa historia, los feminismos interpelaron y cuestionaron, con distintos énfasis, la naturalización de las jerarquías. Para responder a estos desafíos, enel periplo de la modernidad, el binarismo se asentó sucesivamente en la genitalidad, en las hormonas, en la genética y, por fin, en el cerebro. Lejos de lecturas complacientes, Lu anota también las limitaciones de las distintas vertientes del movimiento feminista para producir una lectura verdaderamente revolucionaria de los cuerpos y de la diversidad. Con rigor y claridad, Lu Ciccia explora desde la cognición y la conducta hasta el ámbito biomédico, y pone énfasis en las consecuencias que la mirada androcéntrica ha tenido y tiene sobre la descripción de qué son las enfermedades, cómo y a quiénes afectan, y cómo se tratan. Sin dejar de lado el materialismo, cuestiona la distinción tajante entre naturaleza y cultura. De allí en más, ninguna relación de causalidad queda en pie. Porque la mente es más que el cerebro, y porque el destino no está escrito en la biología.