El Banco de la Nación Argentina y la dictadura

Andrés Wainer
economía política argentina
$18,190
Durante más de un siglo, el Banco de la Nación Argentina ha sido un actor de gran relevancia no sólo por su incidencia en el funcionamiento del sector financiero sino también por las diversas políticas económicas que se aplicaron en cada coyuntura. En este sentido, su rol en el marco de la última dictadura militar tuvo profundas e inéditas repercusiones que merecen ser conocidas y debatidas. A partir de un análisis novedoso y revelador de la política crediticia de la entidad durante la etapa dictatorial y de la conformación empresaria del directorio en esos años, este libro revela el papel específico del banco en la consolidación de un cambio del tipo de Estado y del patrón de acumulación de capital. Los autores examinan el contexto económico internacional y la naciente hegemonía neoliberal asentada en la valorización financiera. Asimismo, explican el proceso por el cual la banca pública se contrajo, mientras que el sector privado nacional cobró una importancia nunca antes vista. Dentro de la banca pública, el que más disminuyó su presencia en el mercado de crédito local fue el Banco Nación, institución que cumplía un papel clave en el financiamiento a las empresas públicas y que contaba con numerosas sucursales en la Argentina y en el exterior. Sin embargo, esto no supuso la desaparición de la entidad como actor, porque el crédito internacional que otorgaba pasó a ocupar el lugar que hasta entonces tenían los préstamos otorgados por las sucursales en el país. Ese tipo de préstamos fueron vitales en su operatoria institucional y estuvieron destinados a empresas estatales y organismos públicos, pero sobre todo a las Fuerzas Armadas. Todas las evidencias disponibles indican que así como el partido militar fue el brazo armado de los sectores dominantes, el BNA fue el brazo financiero de las fuerzas represivas mediante la operatoria que llevaron a cabo sus sucursales en el exterior, dando lugar a un fenómeno sin antecedentes en la historia institucional. Así, este libro es un aporte fundamental para entender la función que cumplió el más importante banco público del país en relación con los objetivos económicos del gobierno militar, esto es: potenciar la expansión de las fracciones del capital que ejercieron la hegemonía durante esos años.

La cultura de la conectividad

José Van Dijck
sociología y política serie rumbos teóricos
$26,390
Si hay un tema recurrente en las noticias, la vida cotidiana y los estudios académicos es el de cómo internet nos cambió la vida. Tanto se ha dicho sobre sus bondades y perjuicios que parece difícil que surja una perspectiva novedosa. Sin embargo, La cultura de la conectividad hace un aporte original sobre una cuestión que en muchos aspectos sigue siendo muy opaca y requiere, sin dilación, un abordaje sistemático. José van Dijck construye una historia crítica de las redes desde su surgimiento en la primera década del siglo XXI hasta la actualidad. Con notable solvencia, propone un recorrido por las principales plataformas (Facebook, Twitter, Flickr, YouTube y Wikipedia), para analizar sus mutaciones, sus modos de operación y de competencia, sus modelos de negocios y sus formas de representación o entretenimiento. Convencida de que estamos ante una nueva fase de la socialidad online, la autora explica cómo tecnologías y usuarios coevolucionan, pero también cómo los medios conectivos avanzan cada vez más sobre las relaciones humanas, codificándolas como datos y convirtiéndolas en mercancías que producen valor. En este punto, pone la lupa sobre algunos desarrollos preocupantes: así, observa que la conectividad está organizada alrededor de opciones como “me gusta” o el “botón-T” de Twitter, inventos que presentan de manera sencilla algoritmos complejos que codifican una inmensa cantidad de datos sobre gustos, preferencias y afectos, una enorme masa de información con un valor comercial inusitado para usos políticos o publicitarios. Por eso los medios sociales privilegian, ante todo, la popularidad, medida por la concentración de conexiones, que en muchos casos lleva a borrar la distinción entre la expresión personal y la autopromoción, y a mercantilizar la identidad propia como un bien que hay que vender o consumir. Lejos de los apocalípticos o integrados que sólo perciben conjuntos estables, este libro entiende los medios conectivos como parte de un ecosistema tecnocultural de carácter cambiante, atravesado por tensiones internas, como la contradicción entre sus propias promesas de transparencia y participación, por un lado, y sus modelos de negocios o su resistencia a los controles legales, por el otro. Constituye, sin duda, una contribución única al debate público sobre los medios digitales, aportando preguntas y argumentos que todavía no se escuchan con la atención que merecen.

Por qué algunas cosas no deberían estar en venta

Debra Satz
derecho y política
$16,490
Existe un amplio consenso según el cual los mercados son la forma más eficiente de organizar la producción y la distribución de bienes en economías complejas, el remedio mágico para todos los males de la burocracia y el control estatal. Sin embargo, a muchos les resulta inadmisible que el criterio de la oferta y la demanda se aplique por igual tanto al comercio de automóviles o indumentaria como al trabajo infantil, los órganos humanos, los servicios reproductivos, el sexo, las armas o las drogas adictivas. Ciertos mercados parecen atentar contra valores humanos fundamentales. Debra Satz, una de las voces más originales de la filosofía política contemporánea, sostiene que hay razones para limitar el ámbito de las cosas que el dinero puede comprar y explica cómo deberían responder las políticas sociales ante este tema. Discrepando con los enfoques puramente económicos, que ponen en primer lugar la eficiencia como rasgo inherente a todos los mercados, y también con los enfoques igualitaristas, que proponen actuar no sobre los mercados sino sobre las inequidades de origen y la redistribución de la riqueza, Satz presenta su teoría acerca del carácter pernicioso de ciertos mercados, capaces de malograr capacidades humanas o de fomentar la existencia de relaciones jerárquicas objetables, de sumisión o de esclavitud, entre las personas. Los mercados de los servicios de salud, de educación o de trabajo tienen efectos sobre quiénes somos, qué podemos hacer y qué tipo de sociedad podemos alcanzar. Frente a esto, discute las potenciales medidas de intervención, desde la prohibición hasta la modificación de los derechos de propiedad o la política distributiva, analiza controversias actuales como las referidas a la prostitución o el tráfico de órganos y ofrece criterios para pensar con mayores matices la compleja relación entre mercados e igualdad social. Este libro, tan accesible como relevante, es un valioso aporte en el campo de la filosofía y la teoría jurídica y económica, a la vez que un formidable ensayo sobre los riesgos de sobrestimar la capacidad autorregulatoria de los mercados.