Es licenciado en Economía por la Universidad de Buenos Aires. Investigador principal del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET) y del Área de Economía y Tecnología de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (FLACSO), Sede Argentina. Profesor en cursos de posgrado en la FLACSO y en otras universidades nacionales. Es autor de varios libros y artículos en revistas especializadas. Fue consultor externo del PNUD, CEPAL, ILPES, OEA, OIT, GTZ (de Alemania), JICA (Japón).

Hecho en Argentina

Daniel Azpiazu
economía política argentina
$16,490
A mediados de la década de 1970, la Argentina se encontraba viviendo un período de crecimiento económico sostenido, motorizado en gran medida por el sector industrial. Apenas tres décadas después, tras un largo período de políticas neoliberales, el país posee un sector fabril pequeño y desarticulado. Hecho en Argentina reconstruye la compleja y dramática historia de la industria nacional desde la última dictadura hasta el final del mandato de Néstor Kirchner. A partir de su imposición en los años treinta, el modelo de sustitución de importaciones había configurado un esquema de acumulación en el que la industria tenía un papel protagónico. El proceso iniciado con el golpe de Estado de 1976 significó el radical desmantelamiento de ese modelo, no en función de resolver las falencias que este sistema había revelado, sino con el objetivo de desarticular la estructura de relaciones económicas y sociopolíticas de las que era ordenador. Luego de la dictadura, dos momentos resultaron decisivos en este proceso: el primer gobierno democrático y el período 1989-2001. Azpiazu y Schorr explican los derroteros del sector implicando factores que exceden lo estrictamente económico. Así, vinculan el comportamiento estructural de la industria con las políticas económicas y los grupos que las impulsaron y sostuvieron, así como con las relaciones entre clases y, en particular, entre capital y trabajo. Fruto de una rigurosa investigación original, este libro ofrece un panorama rico en información y nutrido en análisis para revisar el desempeño industrial en los últimos treinta años. Así, aporta valiosos elementos de juicio para dilucidar si la industria argentina, a partir del abandono de la convertibilidad, marcha hacia la sustentación de un nuevo modelo, más inclusivo, o si las huellas de lo acontecido entre 1976 y 2001 impiden esa transformación.

El nuevo poder económico en la Argentina de los años ochenta

Daniel Azpiazu
economía política argentina
$800

Han transcurrido casi dos décadas desde la primera edición de El nuevo poder económico en la Argentina de los años 80; años signados por la profundización, hasta niveles insospechados —en ese entonces—, de los costos sociales de un proyecto político, económico y social que tuvo su génesis histórica en la dictadura militar instaurada en marzo de 1976. El exitoso intento de "refundar estructuralmente la sociedad argentina en términos económicos, sociales y políticos, consolidando un nuevo proyecto dominante" ha quedado palmariamente demostrado. Al respecto, la historia argentina contemporánea revela un "antes" y un "después" cuya bisagra es la política económica implementada por la dictadura militar. La interpretación de la misma, llevó a concluir en ese entonces que "como producto de un proyecto y una política acentuadamente centralizadores, excluyentes y marginadores se produjo la emergencia de un nuevo poder económico constituido por capitales de antigua existencia en el país pero que hoy ocupan el centro del proceso de acumulación: los GGEE [grupos económicos nacionales] y las ETDI [empresas transnacionales diversificadas y/o integradas] deviniendo su centralidad de sus activos en el país y de sus inversiones financieras en el exterior que los capacita para condicionar, por lo menos, el proceso económico global". No se trataba de afirmaciones arbitrarias inspiradas en una visión apocalíptica. Por el contrario, las mismas se vieron superadas por una realidad donde más de un tercio de los trabajadores están desocupados o subocupados y la mitad de la población ha quedado sumergida en la pobreza. En el otro extremo, un acotado y poderoso núcleo de los sectores dominantes continúan apropiándose de masas crecientes del excedente económico nacional.